Necesitaría cuatro horas seguidas comenta Gustavo en cuanto se sienta. Yo también estuve pensando que quizás sería
conveniente adicionar otra sesión semanal propone Ana María. Gustavo se queda desconcertado. Qué notable dice usted me requiere aún más como paciente mientras a dos de mis pacientes
ya no les srvo como analista. ¿Por qué no me cuenta lo que pasó? solicita
ella. Gustavo le transmite lo sucedido
con María Inés y con Raúl. Son dos
situaciones completamente diferentes concluye Ana María el deseo de Raúl es producto del buen
trabajo que usted realizó con él; creo que es importante que Raúl sienta que
puede tomar la decisión de separarse de usted en el momento en que lo crea
necesario; fíjese lo difícil que le resultó a usted lograr que él pudiera independizarse
de su propio padre; para nada insistiría en continuar el tratamiento; con
respecto a María Inés, sería verdaderamente contraproducente interrumpir la
terapia; es importantísimo lo que salió a luz de los abusos de su infancia; yo
también considero que está estrechamente ligado con la relación con su marido;
confiemos en que regresará; las sesiones abonadas por adelantado son un signo
de que ella reconoce que precisa ayuda; yo esperaría hasta el próximo miércoles
y si no aparece, intentaría convocarla telefónicamente; es un pésimo momento
para interrumpir, la remoción de su pasado y su presente difícil constituyen
una mezcla explosiva. El resto de mis pacientes van evolucionando muy bien cuenta Gustavo para afirmarse la próxima sesión la dedicaré a ellos, hay varios
puntos que me gustaría consultar con usted. ¿Y esta? pregunta Ana María. Esta la necesito para mí; estoy asustado,
temo que mi relación con Natalia está yendo demasiado rápido; me parece que
para ella está tomando un peso que no sé si seré capaz de sostener; no quiero
usarla, ya la hirieron lo suficiente y a mí me encanta estar con ella pero
hasta ahí; no estoy buscando una relación consistente, solo una ayuda para no
terminar en el fondo del pozo. ¿En qué punto están sus sentimientos con
respecto a Cecilia? Una bolsa de gatos; los chicos me insisten en que hable con
ella cuando se conectan pero yo ya no sé qué excusa inventar; verla es tóxico
para mí; quisiera que se quedara en Chile para siempre, pero en menos de un mes
va a estar por acá. Y, entonces, usted deberá enterarse de las decisiones que
ella a lo mejor ya ha tomado. ¿A qué decisiones se refiere? Ana María lo mira con extrañeza es probable que a esta altura de los
acontecimientos ella haya decidido si desea quedarse con Ricardo, regresar con
usted, o continuar sola su camino; y me da la sensación de que usted todavía no
ha resuelto cómo actuaría en cada una de las tres situaciones. Gustavo se agarra la cabeza. No quiero pensar admite. Sería
conveniente que el regreso de ella lo encontrara con una posición tomada, no
queda mucho tiempo por delante. Me parece que usted sigue luchando por su campaña
de adicionar otra sesión comenta Gustavo, malhumorado. ¿De veras cree eso? indica ella arqueando las cejas y luego, incorporándose, añade lo espero el miércoles próximo.
Gustavo se
detiene en la confitería. Compra bombones de fruta para su madre y una cheese cake. A Santiago le encanta.