¿Qué hacés por acá? la sorpresa de su padre se torna en alarma ¿pasó algo con la nena? No, recién me doy
cuenta de que se viene fin de año y no acordamos las vacaciones; hoy les quiero
avisar a mis pacientes. El padre hace un gesto despectivo. No se van a morir en un mes. A Gustavo
se le comprime el pecho. No puedo
largarlos duros de un día para el otro. Suena el teléfono y el padre
atiende. Cuando corta, intempestivamente, pregunta ¿te separaste de Cecilia? Gustavo lo mira, azorado. Eso
parece contesta luego de unos
segundos. ¿Parece? Él ladea la cabeza. Sí, hace meses que estamos distanciados. No me lo contaste, bueno, en
realidad, nunca me contás nada. Jamás preguntás se justifica Gustavo. Ambos
callan y el silencio se hace tan denso que él pregunta ¿me tomo enero?; calculo que la semana próxima cierro varias
operaciones pendientes y no hay nada importante para las próximas semanas;
supongo que Martín, como siempre, podrá hacerse cargo sin problemas. ¿Se van a
algún lado? Gustavo se queda confuso. Serán las primeras vacaciones sin
Cecilia. La nena no está en condiciones de apartarse del circuito médico explica,
justificándose. Sabés cómo son los
chicos; seguro que en unos días la vemos hecha una ardilla. Ojalá, pero nos
dijeron que la recuperación será un proceso lento. ¿Por qué no postergás las
vacaciones para febrero? propone su padre. Estoy destruido, necesito urgente descanso; además, quiero aprovechar
para quedarme con Martina a full. El silencio pesa. Gustavo busca qué
decir. ¿Cómo va el consultorio? lo
sorprende su padre. Bien, por suerte comenta
él ya di algunas altas y pude reponer a
los pacientes. De repente Gustavo experimenta la necesidad de abrirse. He
descubierto a los treinta y cinco que sirvo para esto; espero con ansiedad cada
miércoles; me maravilla la posibilidad
de influir sobre la vida de otros. Su padre lo mira en silencio. Estoy pensando en agregar otro día el año próximo
dice Gustavo, para su propia sorpresa ¿qué
opinás? ¿Como padre o como jefe? A Gustavo le duele tanto el jefe que
mirando el reloj dice se me hizo
tardísimo, lo hablamos mañana se levanta y huye sin saludar al padre.
Novela por entregas. Gustavo está iniciando su carrera de terapeuta. Miércoles a miércoles, su propia vida y la de sus cinco pacientes se va modificando. ¿Los acompañamos?
Páginas
- Página principal
- Otros libros
- Personajes
- Sesiones de Laura
- Sesiones de Camilo
- Sesiones de María Inés
- Sesiones de Raúl
- Sesiones de Daniela
- Sesiones con Ana María
- Extraños cotidianos
- Terapias no tradicionales: imágenes
- Aclaración
- Paisaje(Vicentico)
- Entregas acumuladas en orden
- Sesiones de Joaquín
- Sesiones de Mariana
- Entregas acumuladas. Segunda parte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario